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El Belcanto vuelve a la Opernhaus de Zúrich
— Nota de María José Burguillos del Valle de ©PuntoLatino sobre el recital de Javier Camarena en la Opernhaus de Zúrich el 10.07.2020, Glarus, julio 2020. Fotografías: ©M.-J. Burguillos.
El pasado viernes 10 de julio el tenor mejicano Javier Camarena ofreció un recital de Belcanto en la Opernhaus de Zúrich acompañado por el pianista italiano Enrico Maria Cacciari. Este recital ha sido el primero del tenor después de declararse la pandemia del Coronavirus, por lo que tenía un significado especial para todos.
Camarena conquistó en seguida al público con su simpatía y naturalidad. En la primera parte el tenor interpretó arias en francés. Comenzó su repertorio con un aria de Gaetano Donizetti, “Je suis joyeux”, (de la ópera Rita ou le Mari battu), con la que el tenor nos deleitó con su aterciopelada y cálida voz. Camarena interpretó a continuación el aria de Édouard Lalo “Vainement, ma bien-aimée” (Le Roi d’Ys), regalando al público exquisitos filados.
Camarena y Cacciari culminaron la primera parte del repertorio entre grandes aplausos interpretando “Ah! Mes amis, quels jour de fête” (La Fille du régiment) de Donizetti, aria que repitió en el tercer bis al final de su actuación.
La segunda parte estuvo compuesta en su integridad por arias italianas, entre las que destacaron: “Nel furor delle tempeste… Per te di vane lagrime” (Il Pirata) de Vincenzo Bellini, el aria de Donizetti “Anch’io provai” (Lucrezia Borgia) de Gaetano Donizetti, y el aria de “E fia ver? Tu mia sarai… “Non può il cor, non può la mente” (Betly Ossia La Capanna Svizzera).
“Lunge da lei… De miei bollenti spiriti… O mio rimorso” (La Traviata) de Giuseppe Verdi fue el último aria del programa.
Los prolongados aplausos hicieron que el tenor y el pianista interpretaran hasta tres bises. El primero de ellos fue “Una Furtiva Lagrima” (L'elisir d'amore) de Donizetti.
A continuación Camarena se dirigió al público y afirmó sentirse contento y honrado de poder cantar ante el público zuriqués, dedicando su segundo bis, la "Letanía a la fiesta de todas las almas” de Schubert a las víctimas de la Covid-19 .
El último bis fue la repetición de “Ah!, mes amis, quels jour de fête”. En este aria destacaron los potentes agudos y la gran interpretación del tenor, que consiguió emocionar profundamente a la audiencia.
